ANTONIO PUERTA.- El arte es como una ventana abierta a otro mundo. A veces ese mundo te atrapa y te hace parte de él, te absorbe y te conviertes en un habitante más del universo creado por el artista, sea literario, musical o pictórico. Entonces te ves envuelto en su misterio y, como si fueras Sherlock Holmes, te pones a desvelar las distintas capas de significado dejadas intencionadamente por el autor del libro, la partitura o el lienzo.
Otras veces en cambio ese mundo te expulsa o te impide entrar en él, su acceso está codificado. Las buenas obras de arte permiten siempre entrar y salir, y sales siempre engrandecido y enriquecido, porque en algún momento vislumbras el destello de la belleza, la verdad o el amor.
Foto del libro «Gafas para entender el Arte moderno» (del autor)